Tercera y última parte del destete precoz, dedicado a los riesgos y problemas de la LA.
“La Ciencia y la Sabiduría, lejos de ser una mala cosa, no tienen entre sí a menudo conexión alguna”
William Cowper /1731-1800), poeta británico
Riesgos de un destete precoz
Los riesgos de destetar antes del año, aunque sea un tema poco tratado debido no sólo a las presiones comerciales sino también a motivos emocionales y culturales, son numerosos y deberían ser más conocidos por las madres.
Los riesgos más importantes y que abarcan todos los demás están relacionados con los Riesgos asociados a la leche artificial y los efectos en la madre y el bebé de no amamantar ni ser amamantado. Durante los últimos años, en que se ha intentado recuperar los niveles paupérrimos de L.M. que en las décadas de los 70 a los 90 se llegaron a alcanzar, se ha hablado mucho de las “ventajas de la L.M.” Sin embargo, poco o nada se ha hablado de los “riesgos de la L.A.”, cuando debería haber sido lo lógico: lo importante no es tanto conocer las ventajas de un método de alimentación que ha permitido que la especie humana (al igual que el resto de los mamíferos) se haya desarrollado en la tierra durante miles y miles de años, sino conocer los riesgos a los que nos enfrentamos las madres y los bebés que no desarrollan ese modelo natural de alimentación. A nadie se le ocurriría pincharse insulina sin ser diabético, y por supuesto tenemos el derecho de conocer los efectos secundarios o nocivos de un tratamiento o medicación que vamos a recibir, sin embargo, la introducción y el desplazamiento de la L.M. por la L.A. ha sido el mayor experimento realizado jamás a nivel mundial sin un estudio previo de riesgos y consecuencias.
Aunque no tenemos tiempo de repasar uno por uno los componentes de la leche materna y la artificial (como muestra decir que, a pesar de no estar del todo estudiada, la lista de componentes de la L.A. no llega a dos páginas, mientras que la de L.M. es casi de nueve páginas), ni las consecuencias que esta conlleva (que aún no son 100% conocidos), señalaremos algunos de ellos:
- Para los bebés1
-Mayor riesgo de desarrollar asma y alergias
-Mayor riesgo de sobrealimentación y obesidad futuras
-Menor desarrollo cognitivo
-Mayor riesgo de enfermedad aguda de las vías aéreas
-Mayor riesgo de oclusión dental alterada
-Mayor riesgo de infecciones por contaminación de la L.A.Mayor riesgo de padecer cáncer, diabetes, enfermedades crónicas y cardiovasculares.
–Mayor riesgo de carencia de nutrientes.
- Para las mamás2
-Aumento del riesgo de cáncer de pecho, útero y ovarios, al no verse favorecidas por el factor protector de la lactancia, que aumenta conforme al tiempo de la misma
-Pérdida de la protección contra la osteoporosis.
-Menor facilidad de espaciar los embarazos.
-Mayor riesgo de padecer ansiedad y depresión posparto.
-Menor facilidad para perder el peso ganado en el embarazo.
- Para el medio ambiente
Quizá sean los menos conocidas, o a las que menos importancia se da, pero las consecuencias de sustituir la L.M. por la L.A. a gran escala tiene un gran impacto medioambiental, no sólo por las fábricas de producción de L.A., sino por todo el aparataje de comercialización, envasado, biberones y residuos que esta conlleva. Frente a esto, la L.M. es cómoda, fácil, barata y no genera absolutamente ningún residuo, por lo que es 100% biodegradable.
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| Foto de SINA |
Acerca de Multilacta Lactancia Materna
Totalmente de acuerdo coitngo. De nada sirve que sepamos muchedsimo si no somos capaces de comunicarlo, colaborando con nuestro entorno y siendo capaces de transmitir de forma adecuada y adaptada a la poblacif3n con la que convivimos todo ese conocimiento.En el tema de la lactancia materna es importante que todos los sanitarios (me9dicos, enfermereda, auxiliares, ) rememos en la misma direccif3n, fomentando su pre1ctica y evitando esos malentendidos y culpabilidades a los que hace9is referencia If1aki y tfa.a1Un saludo!