Cristina Ramiro Bolaños es una de nuestras asesoras de lactancia Multilacta oficiales. Hoy puedes conocerla a través de este pequeño post. Ella proporciona sobre todo soporte telefónico y por mail, porque aún no cuenta con grupo, pero esperamos que en breve lo tenga.
Mi gran aprendizaje llegó con mi hija
Terminé mi carrera de Enfermería en el 2007, y durante los años de carrera no ví más que unas pinceladas sobre lactancia materna, y alguna que otra mención dentro de un tema concreto en pediatría o ginecologia y obstetricia. Tras varios años trabajando en diversos servicios de especialidades médicas y quirúrgicas, aterricé en la unidad de obstetricia del Hospital de Móstoles, nada menos que embarazada de mi primera hija, Iris. Allí me hicieron un contrato de verano, sin saber nada sobre lactancia materna, salvo que era lo mejor, y poco más. Me dijeron en qué carpeta del escritorio del ordenador podía encontrar el protocolo de lactancia del hospital,y allá que fui a estudiármelo, como enfermera y como futura madre. Ahora sé que metí la pata muchas veces en esos meses, a sabiendas de mi escasa formación y a pesar de mi afán autodidacta.
Mi gran aprendizaje llegó con mi hija. Ella es la responsable de quien soy hoy. Una transformación absoluta de mi vida y mi forma de vivir y amar.
Nunca había vivido algo tan maravilloso y revelador de quién soy realamente, como la maternidad y amamantar a mi hija, no sin problemas. Esos problemas me hicieron luchar por mi lactancia, acudir a Multilacta como mamá y apasionarme por una ciencia que poca cabida tiene en las clases de medicina y enfermería, desgraciadamente. La lactancia materna bien podría ser una carrera universitaria más, como cualquier ingeniería. Estudiar y aprender cada día más sobre lactancia me llevó a querer ayudar a otras madres que injustamente no recibían la ayuda que merecían. Sentía que todas las madres tenían el derecho a saber todo lo que yo estaba descubriendo y poder así luchar contra sus problemas de lactancia que otros profesionales no sabían abordar. Y esa fue mi motivación para hacerme asesora de lactancia.
3 años y medio de lactancia materna nos han dejado un vínculo maravilloso y un poquito más de salud a ambas,además de multitud de fotos y recuerdos únicos. Ahora, con mi segunda hija, Vega, espero repetir la experiencia y por supuesto seguir aprendiendo cada día más de su mano, porque ellos sí nacen sabiendo de lactancia, y a veces sólo debemos dejarnos enseñar.
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